Los comienzos de la Aromaterapia

La utilización de los aceites esenciales para sanar el cuerpo, mente, espíritu y rituales religiosos, viene de muy antiguo, seguramente desde hace miles de años. Todas las grandes civilizaciones de la humanidad los utilizaron para diversos fines.

Me imagino los primeros humanos encendiendo una hoguera, quemando diversos tipos de hierbas y troncos mientras veían como cambiaban sus dolencias en algunos de ellos o el estados de ánimo, así, de esta forma, paso a paso se iría registrando las diversas cualidades de las plantas.

Se aprendería por el método de prueba y error y también mediante la observación de plantas que comían los animales enfermos y comprobar que distintas plantas, raíces y bayas les ayudaban con ciertos síntomas. Algunos de ellos tendrían poco efecto y otro

s, sin embargo podría haber empeorado los síntomas, produciendo vómitos y en ocasiones la muerte.

Esta sabiduría fue transmitida de generación en generación, junto con los nuevos conocimientos e innovaciones, así con el paso del tiempo derivó en todo el conocimiento herbal de nuestros días.

Descubrieron que al quemar bayas y hojas de ciertas plantas, podían producir efectos en la persona. Ciertos humos producían sueño, mientras que otros aliviaban ciertas dolencias, otros estimulaban los sentidos y otros producían experiencias místicas y religiosas.

Se honraba la naturaleza mágica de estas plantas aromáticas quemando y ofreciendo el humo a los dioses de aquellas primeras civilizaciones.

Hoy en día se puede ver que este principio sigue todavía vigente en los templos de oriente, donde se sigue quemando incienso en los altares dedicados a deidades hindúes y budistas. La iglesia católica continua con su tradición de quemar incienso durante sus servicios religiosos. El término aromaterapia llegaría mas tarde.

#LigiaMartinez